jueves, 20 de noviembre de 2008


Sí, soy de esas personas que tropiezan miles y miles de veces con la misma piedra. Que parece que le gusta caerse y tener que levantarse. Sí, los desafíos me atraen. Pero una cosa es eso y otra es vivir equivocándome con lo mismo. Perdí muchas cosas y noté que no las aproveché en su momento. Sin embargo, hoy no aprendo. Sigo sin darme cuenta de todas las cosas que tengo, que el día de mañana me van a faltar y sé que me voy a sentir responsable por no haberlas vivido más feliz, pero a pesar de eso no cambio mi forma de verlas. ¿Por qué? No lo sé, es de esas preguntas que no me contesto. Hace un tiempo perdí a alguien muy importante en mi vida, y tiempo antes yo sabía que tenía que demostrarle a ese alguien y a mí misma lo importante que era. Y cada vez que escuchaba su voz sabía que debía demostrar alegría y disfrutarlo y hacerlo sentir bien. Sin embargo, no lo hice. Sufrí el doble cuando tuve que llorarlo, porque sentía inmensa culpa. A veces pienso que nos gusta llorar. Que nos gusta sentirnos mal. Que si se nos viene el mal, que sea terrible. Estamos tristes y qué se nos ocurre? Escuchar canciones tristes. A veces pienso que es porque me gustan mucho los extremos. Si quiero alegría, quiero estar eufórica, quiero gritar, cantar, saltar, bailar y no parar. Si estoy triste, quiero llorar hasta que se me agoten las lágrimas del alma y hasta que mi cuerpo haya perdido todo tipo de humedad. El problema, es que es como que tenemos un medidor adentro. Algo que nos lleva siempre a lo neutral, a la nada. Por eso es que solemos vivir creyendo que estamos viviendo la nada. Y me molesta. Si estoy mal, permítanme sufrir como nunca en mi vida. Y si estoy bien, dejenmelo un ratito más.
Ahora que lo repienso, creo que es por esto que tropiezo con la misma piedra muchas veces. Mi reloj interno me lleva a mi estado neutral en menos de lo que canta un gallo, por lo tanto mi cabeza no llega a registrar la situación que acabo de pasar y mañana vuelvo a equivocarme.
Es mi sistema corporal e intectual. Tal vez la mejor solución sea amoldarme a él, aprender de eso y antes de ponerme en mi estado neutro de vuelta, escribir cada palabra que pasa por mi cabeza.
Sí, claro, para después leerlo y decir "qué loca que estaba", tirarlo a la basura y seguir mi caminito empedrado con los ojos vendados.

- necesito aprobar, que me ilumine una luz divina para poder estudiar y sacar todo a la mierda, poder tener vacaciones desde el 28 de noviembre.
- el domingo graduación de mi hermana, no lo puedo creer.. YA? nanjdsnfsdn futura profesora de inglés, foo. está bien que me viva peleando y no nos soportemos pero me gusta ver que esta pasando por esto y esta feliz, (se ponía melancolica) quiero crecer y poder hacer lo que me gusta, estoy muy ansiosa con muchas cosas
- no soporto más a las personas que no me conocen y se creen que se las saben todas, ocupense en sus vidas, ohhh que lástima me dan
- vamos los piojos.
(?

No hay comentarios: